Álvaro de Marichalar desmiente su detención: "¡He sido secuestrado por sorpresa y engañosa traición!"
Álvaro de Marichalar está indignado. Desmiente categóricamente que haya sido detenido este jueves. No, lo que ha sido es secuestrado en plena vía pública por parte de tres Mozos de Escuadra, quienes lo trasladaron al interior del palacio de la Generalidad «con inusitada violencia terrorista y malos tratos», según su propio testimonio. Un duro episodio que el noble ha querido compartir vía email para ‘denunciarlo’ públicamente.
«Hoy toca a todos defendernos de la corrupción del 3% que actúa en Cataluña pero también en el resto de España y cuya primera consecuencia es el golpe de Estado continuado desde las instituciones catalanas. Tres individuos vestidos de Mozos de Escuadra me han SECUESTRADO por sorpresa y engañosa traición en plena vía pública ante periodistas y cientos de personas que exhibían banderas ilegales y gritaban proclamas delictivas», ha comenzado su misiva.
Álvaro de Marichalar en imagen de archivo /Gtres
«Mi delito fue navegar en solitario contra la marea de la cobarde coacción, armado de la bandera de España con Europa y proclamando. No había motivo legal alguno para secuestrarme; pegarme; intentar humillarme y detenerme. No me he «resistido a la autoridad», como intentan justificar… Mienten más que hablan y manipulan hasta la luz del Sol. ¡¡Quien en su sano juicio se plantearía la posibilidad de resistir ocho contra uno…!! Estoy leyendo la versión que según publica algún medio han dado los Mozos ‘del palacio’ y es todo RIGUROSAMENTE FALSO DE TODA FALSEDAD. ¡MANIPULACIÓN!», ha escrito el aristócrata, muy enfadado.
Pero ahí no ha quedado su queja pública y se ha desquitado contra la autoridad: «USTEDES ESTÁN DESHONRANDO EL UNIFORME QUE LLEVAN Y LA SENYERA DE MIS ANTEPASADOS. La actual administración autonómica sediciosa catalana no para de manipularlo todo y pervertirlo todo, todo el tiempo».
¿Cómo fue su secuestro, según él? «Tras SECUESTRARME, me han metido en NUESTRO Palacio de la Generalidad (que pertenece a todos los catalanes y resto de españoles) tirándome entre viles insultos al suelo ocho golpistas armados de pistolas; odio y deshonor. Han intentado humillarme pero no han conseguido. Me han pegado todo lo que han querido y hasta cansarse; esto sí lo consiguieron mientras estrellaban mi cara contra las antiguas losas que vieron pasar a nuestros antepasados forjadores de la España reconquistada; esa secular España siempre hecha en Unión. Los presuntos delincuentes que okupan el poder secuestran y detienen a las personas que reclamamos el cumplimiento de la Ley. Esto ha sido lo más triste que he vivido hoy y lo único que ha logrado arrancar mis lágrimas».